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IBD EN LOS HURONES

Qué es el IBD

Principal

Esta enfermedad también recibe el nombre de síndrome Enfermedad inflamatoria intestinal (EII), Colitis Crónica, Enfermedad Debilitante Proliferativa, y Enfermedad de Intestino Proliferativa .

Todos los seres vivos tienen sus puntos más débiles en los hurones, su punto débil se encuentra en el sistema endocrino y digestivo. IBD o Inflamatory Bowel Disease es una enfermedad conocida tanto en humanos como en otros animales, recientemente ha sido descubierta en hurones, por lo que no se tiene mucho conocimiento sobre ella, casi toda la información que se puede encontrar es relativa a roedores, caballos, monos o humanos, aunque cada vez se identifican más hurones con este síndrome.


Básicamente, es una afección en la cual el cuerpo se torna contra sí mismo, hay una sobrecarga de las defensas normales del tracto intestinal de forma que éste queda dañado.


Para entender correctamente qué es el IBD primero se tienen que entender los mecanismos protectores que tiene de forma natural el tracto intestinal; muchas personas no son conscientes del importante papel que desempeñan protegiendo el cuerpo de enfermedades, de hecho más de la mitad del tejido linfático del cuerpo reside en el tracto intestinal, cada día, una compleja red de células filtran sustancias de los intestinos decidiendo qué es algo normal y qué es una amenaza; a las sustancias (antígenos) que son reconocidas como nutrientes se les permite el paso, y aquellas que no son reconocidas son evaluadas como amenaza potencial, estas amenazas pueden ser bacterias ingeridas, virus, sustancias tóxicas o alergénicas, incluso células tumorales pueden desencadenar una respuesta en forma de inflamación. Una vez el sistema ha reconocido el antígeno como amenaza éste es eliminado, y se crea un línea específica de memoria celular que provee una respuesta rápida si el antígeno reapareciera de nuevo meses o incluso años más tarde.


Cuando el cuerpo identifica un antígeno como amenaza, se emplean una serie de defensas o armas para eliminarlo, cuando se detecta, los linfocitos entran en acción asumiendo dos importantes papeles: Ayudar a las células a desencadenar y mantener la inflamación, y como supresor de las células que provocan la reacción inflamatoria. Los linfocitos secretan citocina, que no sólo ordena qué hacer a las otras células, si no que hace que el área en la que se encuentran se vuelva inhabitable para los invasores, las citocinas reclutan otros tipos de células inflamatorias para poder fagocitar al antígeno invasor y liberar enzimas destructivas para matar otros antígenos (y desafortunadamente no solo matan los antígenos invasores y considerados como amenaza). Poco a poco van llegando más linfocitos que "entran en combate con los invasores", algunos la fagocitan, otros la devoran, algunos crean anticuerpos que rodean con una membrana y destruyen la amenaza...


Cuando la violenta batalla termina, los linfocitos supresores abandonan el lugar quedando solamente las células inflamatorias, en este momento se crea la memoria celular y las células encargadas de la regeneración de la zona. En este caso, los linfocitos son los principales causantes de la inflamación.


Hay una forma poco común de IBD, llamada enteritis eosinofílica donde la función primordial en las reacciones alérgicas o antiparasitarias de los linfocitos es multiplicarse masivamente y esparcir las enzimas destructivas a lo largo de todo el tracto intestinal. Un intestino normal está formado por millones de vellosidades intestinales (proyecciones en forma de dedo), que incrementan el área del éste cientos de veces, esto es importante porque ayuda a extraer al máximo los nutrientes y el agua de los alimentos.

Cuando un hurón tiene IBD, estas vellosidades intestinales se destruyen, reduciendo la capacidad de absorción del intestino hasta un 90%, de esta forma los nutrientes pasan a través de éste sin digerir y sin absorber con la consiguiente diarrea.

No se sabe por qué exactamente la respuesta inflamatoria no desaparece en los animales, desencadenándose el IBD, tal vez es debido a la continua presencia de la amenaza, o debido a que se reconoce como amenaza la propia flora intestinal, o debido a un componente de la dieta. También se cree que cuando ocurre esto es porque hay un problema con los linfocitos supresores, haciendo no les sea posible cancelar la respuesta inflamatoria. Sea cual sea la causa, el resultado es una inflamación crónica del intestino que no puede ser anulada sin intervención médica y cambio en la dieta con el consiguiente daño en él.

Como se reconoce el IBD

IBD2

Muchos de los casos que una vez que se pensaba que eran Enteritis Catarral Epitozooica (ECE), infecciones por Helicobacter y enfermedades Aleutianas del visón se reconocen ahora como IBD.

Por desgracia, los dueños y los propios veterinarios tienen pocas formas de determinar y detectar la enfermedad, ya que a diferencia de otras enfermedades que afectan a los hurones, no hay unos "síntomas clásicos", por lo que muchas veces se pasa por alto.


Inicialmente, los hurones que tienen episodios de diarrea, falta de apetito o cambios bruscos en preferencias de la comida pueden ser susceptibles de padecer IBD. Muchas veces estas diarreas pueden cambiar a heces granuladas que indican que el intestino es incapaz de absorber las proteínas, la grasa y los nutrientes correctamente.

IBD no es un problema específico con una sola causa, se puede decir que es un conjunto de afecciones que acaban desencadenándolo, si observaras que tu hurón presenta estos síntomas deberías ir al veterinario para que le hicieran las pruebas y comprobar si tiene o no IBD:

- Heces con mal aspecto, con alta mucosidad, gelatinosas, blandas, granuladas o diarrea.


- Rechinar de dientes.


- Falta de apetito


- Pérdida de peso.


- Letargia.


- Úlceras (sangre en heces o rechinar de dientes).

Cacasangre

- Hepatitis


- Aumento de la frecuencia y del tamaño de las heces


- El recto y el ano aparecen inflamados, muchas veces hay prolapsos

Prolapso

Cuando el problema está presente un largo periodo de tiempo, el animal tiene una apariencia debilitada, el pelo es débil y carece brillo, se le notan los huesos y se pueden apreciar bultos en el abdomen ya que los ganglios linfáticos se agrandan.


Actualmente, las opciones para diagnosticar el IBD en hurones u otros animales están limitadas a la biopsia, hoy en día se puede realizar mediante endoscopia por lo que no se requiere cirugía abdominal con su consiguiente recuperación. Una vez se recoge la muestra de tejido se puede analizar mediante inmunohistoquímica, aunque el diagnóstico preciso no suele aumentar las posibilidades de tratamiento de la mascota. Si se hacen rayos X deberían ser de la zona intestinal y de los ganglios linfáticos, que si se hallan inflamados puede ser debido al IBD, aunque no es un diagnóstico definitivo ya que otros problemas de salud pueden tener los mismos síntomas.

Si el IBD no es controlado adecuadamente puede tener resultados devastadores, ya que el intestino inflamado no solo es incapaz de absorber los nutrientes de la comida, que puede llevar a una malnutrición y una severa deficiencia de nutrientes sino que las diarreas típicas del IBD pueden hacer que el hurón se deshidrate; el IBD también afecta a la movilidad de los intestinos y además una inflamación crónica de cualquier tejido aumenta significativamente el riesgo de desarrollar tumores en la zona.

Causas del IBD

La lista de causas del IBD es infinita, en humanos, se ha encontrado una estrecha relación con las dietas basada en gluten (enfermedad celíaca) y se han obtenido evidencias que demuestran que la flora intestinal tiene un papel importante en el IBD. Estudios realizados con ratas han demostrado que en ratones propensos a tener IBD, cuando crecen con un tracto intestinal estéril no desarrollan IBD, en otros experimentos realizados con titíes de cabeza blanca se ha descubierto una nueva bacteria que causa la enfermedad en individuos previamente sanos. En cuanto a hurones, encontramos las siguientes causas, aunque muchas de ellas son solamente teóricas, pues no se invierte prácticamente nada en el estudio de la salud de los hurones:

IBD inducido por bacterias

Helicobacter

En muchos hurones que padecen IBD se encuentra la bacteria helicobacter mustelae, sin embargo esta bacteria también está presente en muchos hurones sanos. Antes de que la bacteria provoque problemas gastrointestinales el hurón tiene que sufrir algún tipo de estrés, cuando esto ocurre el tipo de patología es una invasión de linfocitos y plasmocitos en la mucosa del estómago. El estómago también se puede ulcerar. La idea de que la bacteria Helicobacter es importante y está presente en los problemas gastrointestinales de los que hablamos (IBD), es que muchos hurones mejoran cuando se les trata con antibióticos, pero sin embargo, el IBD tiene picos y valles naturales lo que hace que sea difícil diagnosticar si la mascota mejoró por si misma a causa de los antibióticos o había mejorado de forma natural.

También se han hallado tumores estomacales en hurones que albergan Helicobacter, aunque no se ha podido establecer una relación causa/efecto. Aunque hay algunos veterinarios que restan importancia al papel de la Helicobacter como causa primaria de IBD, no hay que olvidar que puede haber cierta relación aunque no sea del tipo causa/efecto.

Hay otra bacteria, Lawsonia intracellularis, que se aisló a mediados de 1980 a partir de hurones destetados que presentaban IBD.

Lawsonia





IBD asociado a virus

Coronavirus

El coronavirus también se ha asociado al IBD en los hurones, esta forma de enfermedad se llama ECE (enteritis catarral epitozooica)

Normalmente se asocia el virus al IBD cuando se tratan hurones jóvenes, no se sabe si el coronavirus juega un papel importante en hurones adultos que desarrollan IBD.

Hay algunos veterinarios y criadores de hurones que defienden similitudes entre esta condición y una enfermedad típica de los gatos, que se desarrolla a partir de un coronavirus llamada FIP. También se cree que los rotavirus están implicados en el IBD de hurones jóvenes.


IBD provocada por el sistema inmunológico

En humanos, algunas formas de diarrea crónica están asociadas al propio sistema inmunológico que ataca al propio cuerpo del paciente. Algunos veterinarios se plantean si podría ocurrir lo mismo en hurones, ya que estos presentan mejoría cuando se les administra prednisona, un medicamento que restringe parte del sistema inmunológico del cuerpo.


IBD inducido por sensibilidad a ciertos alimentos

Pollo

Se sabe que en muchos casos, la diarrea crónica es debida a alergias alimentarias y sensibilidad a algún tipo de ingrediente, en estos casos se ha observado que el animal en cuestión mejora cuando se retiran las fuentes de almidón o de la proteína de la carne que está causando la inflamación.


IBD idiopática crónica

El término idiopático es una forme elegante de referirse a cuando se desconoce la causa de algo. Cuando hay problemas en algún otro órgano sistema del cuerpo de la mascota, puede desencadenarse diarrea crónica, no es raro que animales domésticos que tienen problemas de salud como linfoma, adrenales o problemas pancreáticos desarrollen IBD.


IBD inducida por estrés

El estrés por sí solo no causa diarrea en los hurones, los hurones son animales menos expresivos que los perros, gatos o personas que muestran signos evidentes cuando están bajo estrés, en ese sentido se parecen más a animales salvajes que ocultan sus debilidades con el fin de no ser devorados. El estrés tiene una influencia directa con la motilidad intestinal y con el sistema inmunológico de todos los animales, factores como un aumento de la temperatura ambiental, hacinamiento, sed, hambre, falta de ejercicio pueden causar diarrea, y si estos factores son permentes, la diarrea será crónica.

Tratamientos

Tratamientos con medicamentos

Es importante mantener controlados los brotes de inflamación que producen el IBD, cualquier inflamación que no pueda ser controlada por la dieta debe controlarse mediante medicación. En un principio el tratamiento se inicia con Amoxicilina, Metronidazol y Sucralfato, la amoxicilna y el metronidazol ayudan a controlar las posibles infecciones que puede resultar debido a la inflamación, y el sulcralfato es un protector de estómago e intestinos que ayuda a reducir la inflamación. SIEMPRE HAY QUE SEGUIR LAS INSTRUCCIONES DEL VETERINARIO CUANDO SE VA A ADMINISTRAR ALGÚN TIPO DE MEDICAMENTO

Si mediante este tratamiento no hay mejoría, el siguiente paso es administrar corticoesteroides, es preferible utilizar Prednisolona a Prednisona pues no sobrecarga tanto el hígado. Hay que tener en cuenta que los corticoesteroides tienen efectos secundarios graves y son muy fuertes para el cuerpo del hurón, por lo que la administración debería utilizarse como último recurso, en cualquier caso, no hay que tener miedo de administrar prenidsolona al hurón debido a los efectos secundarios, pues si el IBD no se controla el hurón puede llegar a morir lenta y dolorosamente En algunos casos también se administra medicación para reducir el dolor estomacal y que el hurón recupere el apetito.


Tratamiento mediante la dieta

Cambios en la dieta ofrecen un gran beneficio a hurones con IBD Una dieta balanceada a base de carne cruda es lo mejor que podemos ofrecer a un hurón con IBD, además del beneficio de la dieta en crudo, tienes completo control sobre lo que el animal come, lo que hace que la enfermedad se controle mejor. Es muy importante descubrir que ha desencadenado el IBD en tu hurón, es un proceso largo y costo y se basa en eliminar todo tipo de proteína en la dieta excepto una, y poco a poco ir agregando más (una a una) hasta descubrir qué alimento causa la inflamación. Cada hurón con IBD es diferente algunos presentan vómitos debido a la alergia, otros llevan bien los cambios muy graduales en el tipo de proteína, otros no aceptan más 1 o 2 proteínas diferentes al mismo tiempo... por ello es importante mantener un control de la enfermedad, llevar un diario donde se registren los síntomas y cambios que presenta el hurón una vez toma determinada proteína. Intestinos severamente dañados requieren dieta blanda y altamente digestiva.

El cordero es una carne altamente digestiva, en muchos sitios es considerada hipoalergénica.

Cordero

La carne de cabra también es muy digestiva y bastante más económica.

Cabra


Es importante también si se desarrolla IBD, introducir una proteína nueva, que nunca haya probado el hurón y empezar con esta la dieta de eliminación

Suplementos

Estos suplementos ayudan al tratamiento del IBD aunque siempre ha de ser algo secundario, siendo más importante el cambio en la dieta descrito anteriormente.


- Hongos Reishi: Reducen la inflamación y tienen alta concentración de antioxidantes.

Reishi

- Enzimas pancreáticas (Pancreatina): se esparcen sobre la comida (preferiblemente 1 hora antes de alimentarlos para que estas tengan tiempo de actuar) esta enzima ayuda a hacer la comida más digestiva que se puedan absorber mejor los nutrientes.

Pancreatina

- Probióticos: Se pueden añadir a la comida en forma de polvo, o probióticos caseros como kéfir, éstos ayudan a restablecer la flora intestinal.

Kefir

- Aceite de salmón: Provee de ácidos grasos omega fácilmente digestibles, que pude servir de ayuda ya que los hurones con IBD tienen problemas para absorber nutrientes.

Grizzly

- Carnivore Care: es una comida altamente calórica y rica en nutrientes que se suele vender en veterinarios. Se trata de unos polvos que se mezclan con agua tibia y se forma una sopa.

Carnivore care

Puede el IBD curarse de forma permanente?

Normalmente un hurón que desarrolla IBD en la madurez requiere cuidados especiales durante toda la vida. Cuidados especiales junto a los tratamientos suscritos por el veterinario harán que los síntomas se minimicen, pero nunca serán eliminados, por ello es importante controlar la dieta y el peso de nuestro hurón e intentar mantenerlo libre de estrés lo máximo posible.

Relación del IBD con otras enfermedades

Parece ser que el IBD va mano a mano con la enfermedad adrenal, si estás teniendo problemas en controlar el IBD de tu hurón, o si muestra síntomas de adrenales, aunque creas que no lo tenga, vale la pena probar Lupron durante 3 meses o incluso utilizar el implante de deslorelina.



Bibliografía


Irritable Bowel disease in Ferrets. Katt Crouch. Holistic ferrets. http://holisticferret60.proboards.com/thread/13875/irritable-bowel-disease-ferrets-overview

An enigma wrapped in mystery, Inflamatory Bowel disease. Bruce Williams, DVM, DACVP. Ferret magazine

Inflamatory Bowel disease and Chronic diarrhea in your ferret. Ron Hines DVM PhD http://www.2ndchance.info/inflammatoryboweldisferret.htm

Inflammatoy bowel disease in ferrets. Kandi and Aaron Kupel.

http://www.smallanimalchannel.com/ferrets/ferret-health/inflammatory-bowel-disease-in-ferrets.aspx

Fotografias de heces cortesía de Irene Gonzalez (Ahuca )

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